Noche de 11 de julio en Donostia; la benemérita, nuestra gloriosa Guardia Civil haciendo actividades patrióticas en su tiempo libre. No se pierden el tono, ni el uso del idioma, ni los comentarios, ni los manifestantes espontáneos, ni la seguridad de la marcha automovilística, ni desde luego la rojigualda monárquico-fascista. Real como la vida misma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario