Una vez más debemos denunciar que las y los trabajadores de Euskal Herria estamos condenados a ser meros espectadores de lo que sucede en Madrid. Espectadores ante las negociaciones que se están dando pero no en las consecuencias que se nos van a imponer.
Ya se empieza a perfilar cual puede ser la reforma que está preparando el Gobierno. Desde luego no augura nada bueno para las y los trabajadores aunque pretendar venderlo como algo equilibrado.
Las cuestiones principales que se barajan son el abaratamiento del despido y la flexibilidad interna en las empresas.
En cuanto al despido decir que nos parece inaceptable lo que se está planteando. Hay dos cuestiones a tener en cuenta:
- se habla de generalizar el contrato de 33 días de indeminización y que parte de esa indeminización la pague el Fogasa
- por otro lado se quieren ampliar las causas del despido objetivo con lo que el despido improcedente perdería peso frente a la indemnización de 20 días
En definitiva estamos halando del abaratamiento del despido y que además las empresas no tengan que asumir todas las indeminizaciones.
Junto con esto nos hablan de la flexibilidad interna en las empresas. Se trata de dar todo tipo de facilidades a las empresas para aplicar cláusulas de descuelgue, es decir desvincularse de lo pactado en convenio tanto en salarios como en condiciones laborales. En definitiva se trata de que los empresarios tengan la capacidad unilateral de modificar las condiciones salariales y laborales, de instaurar el modelo salarial y de relaciones laborales que más les convenga en cada momento.
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